10/3/13

chaque gurisa!

puedo decirme que ya no llevo penas añejas (pesadas)
ni penas o cruces ajenas....

aunque admito que a veces,
me siento tan tan ligerita,
que me tiento, por puro aburrimiento,
de cargar tus lamentos y de hacer tu tragedia mía....

y entiendo que es éste, un aprendizaje que me regalaste.
trabajé tanto pa vaciarme, pero....

(ahh.... tan lindos los 'peros')

...pero de vez en cuando, de obstinada nomás, empiezo a guardar algún dolorcito de acá... otro  rencorcito de allá...

y me río de esas trampas sutiles, que aunque uno crea ajenas, son siempre propias.
¡y caigo!
¡cómo no caer!
¡tan sabrosas a veces!

y me río y me río después de desanudar mi garganta y mis tripas...
satisfecha por mi paciencia de marinera e inquieta esperando el próximo enredo.

y grito al río que me importa un pepino
y que sea lo que sea, señores, que la vida son dos días
y debajo de esta piel y estos recuerdos
solo hay magia chispeante
esperando salir a atropellarte... una vez más.




6/3/13

Milagritos, milagrón....

La ilusión te hace creer que te relacionas con otros, pero esto no es posible. En todo momento te relacionas contigo mismo frente a otros. En todo momento estas eligiendo y decidiendo, manifestar, crear y experimentar, algún aspecto de tu ser. Y son las aparentes relaciones con los demás, las que te permiten conocerte a ti mismo, en tu propia experiencia. Sólo existe una relación, es la relación contigo mismo. Los otros y los acontecimientos son ángeles y milagros convocados por ti, en tu camino a la realización.

Y en esta medianoche, agradezco a los grandes y pequeños milagros que se acercaron a mi vida de mil maneras, con diversas máscaras, a mostrarme en todos los casos, y sin excepción, lo mejor de mi.
Porque hasta mi sombra, se convierte en cualidad cuando la reconozco y la dejo salir.


dificil

5/3/13

;)

No sé bien cómo ayudarte.
Pero puede que tenga alguna idea vaga....

Si miro para atrás, no hubieron muchos acontecimientos que me sobrepasaron.
Cuento realmente 1 situación que creí me aplastaba contra el suelo,
y esa 1 fue suficiente para comprender que:

Que nadie puede ponerse en mis zapatos, le van a quedar o chicos o grandes (y se va a tropezar!)
Que nadie puede quitar mi tristeza, mi rabia, mi confusión....
Que ninguna otra mano que no sea la mía, puede empujarme hacia adelante o sacarme del hoyo.

Pero fue en ese mismo momento cuando saqué el valor de un suspiro y comprendí que: o yo o nadie
Que puedo pedir ayuda, y rodearme de gente que, aunque no me quite la tristeza, me alivia, me distrae, me hace reír.
Y así ganar el tiempo necesario para que las ideas y sentimientos se acomoden solitos
Ese tiempo me duró años. Tan duros que no los recuerdo.

Y puedo decir con algo de esperanza que hay agradecimiento en mis lágrimas, porque esa experiencia, me acerca a mi.

Dicen que no hay mejor ayuda que la que se da una vez te la piden.

Confío en tu magico poder, porque el mio, salio cuando crei que menos lo tenia!

mi niño se levanta con ilusion que rapido va su corazon salta la cerca como un ladron sale como bala de cañon busca compadre y se van a navegar por el ancho mar de su jardin se van firme grita su decision de pelear hasta el final su temor de pelear hasta el final su temor de pelear hasta el final su temor  lalala lalalala 


3/3/13

Volando voy

Cuando pregunté ¿cómo independizarme?

Escuché: Alejándote de quienes dependen de vos, porque vos, hace tiempo, ya no dependés de nadie.

Zas!

¿Qué parte de responsabilidad tengo en las dependencias de otros hacia mi?

Quizá tanta, como la que que tengo al depender de otro.

Y pienso en mamá, que siempre la escuché decir cuando le preguntaban sobre sus mellis lejos: "Les di alas, para que vuelen"

Volando voy hasta vos.

Volando vuelvo hasta mi. También.