4 am.
Uno de enero de dos mil diez.
Luna llena reflejada en el río Paraná.
Comenzamos un año nuevo. Pero comienza, sobre todo, una noche nueva.
Es esto lo que me importa.
El cambio de año no hará que mis días sean más o menos prósperos.
Yo sí.
Yo, que me lleno y vacío cada día.
Como en este instante, que me lleno los ojos y el corazón de luna, de verano, de brisa fresca, de invierno lejano, de río, de reflejo plateado y hasta del disc-jockey gritón del boliche de enfrente.
Esta luna es mágica.
Y me está acompañando - ahora -
Qué me importa lo que queda del año!
Feliz nuevo día!
y yo compartí con vos unos minutos mágicos de luna y puente de plata sobre el agua, IUPYYYYY.
ResponderEliminaryo dije, luna, tan bella, tan cerca, que no nos veas llorar este año y vos- sí , es cierto, en eso estaba pensando ... río y toco madera, jaja, mi cabeza, da igual, todo está en la cabeza y hay que reir aún entre lágrimas, a pesar de las lágrimas, a través de ellas seguir llenándose los ojos y el cuore. Qué remedio queda si la vida está hecha de lágrimas y sonrisas.
Y de todas maneras, llorando y/o riendo te amo.
mom2010